Hay una segunda que me duele bastante más y está relacionada con el mundo sindical, mundo que comparto desde hace bastante tiempo, leo hoy sobre las propiedades “no intelectuales” de una persona de la ejecutiva de CC.OO relacionada sindical y profesionalmente con la banca; me duele porque desde la óptica de los que intentamos realizar una labor sindical en este caso desde UGT es complicado trasladar a los trabajadores este tipo de actuaciones ya sean de un sindicato o de otro.
El mundo sindical es bastante más complicado que nuestra vida normal en los partidos o en asociaciones, tiene un cariz fundamental; te juegas las habichuelas, la guardería, etc. Jugarte esto significa implicarte con la vida directa no en abstracto de tu compañero de despacho, en la obra o en cualquier otro lugar. Y es más sangrante cuando la labor que realizan los sindicatos no es proporcional a la implicación de los/as trabajadores, a todos nos cuesta quitarnos tiempo de lo personal (más cuando intentamos buscar la conciliación de la vida familiar y laboral), junto a esto tenemos el desprestigio que se tiene de los liberados en empresas tanto públicas y privadas.
Hoy tenemos una chinita más en la explicación de cualquier negociación con la empresa, espero que estas actuaciones tengan los premios ajustados a las acciones.